lunes, 24 de octubre de 2011

El fin de la web y otras predicciones

En los últimos días aparecieron varias sorprendentes declaraciones que hablaban del fin de la Web (WWW), de la agonia de una plataforma "obsoleta" ante el empuje de las plataformas móviles que ofrecen tabletas y smartphones. Algunas venían de ejecutivos de alto nivel en empresas importantes como Google.

No soy adivino ni quiero jugar a adivino, pero me temo que aparte de todas las posibles apreciaciones y la confusión habitual WWW-Internet, el titular periodístico pudo sacar de contexto las declaraciones de dicho directivo. Yo no creo que la World Wide Web muera en 3 años como comentaban en ese artículo pero si que sigue con su evolución constante. Se abre un panorama enorme con HTML5, con Java, con múltiples oportunidades de extrapolar desarrollos, aplicaciones y servicios.

Lo que esta cambiando, y lo hace constantemente, es la forma de navegar, la forma de acceder a la información, la forma de interactuar y aprovechar Internet, las necesidades de los usuarios y los contenidos demandados. La World Wide Web es uno más de los servicios de Internet, accesible y de manera creciente desde nuestro móvil, tablet, pc, consola, televisor, y todo aparato que quieran fabricarnos con esa funcionalidad.

Las aplicaciones han abierto otra puerta más. La accesibilidad es permanente. Es otro nuevo escenario en el que tenemos que interactuar. Nuestra presencia en el web puede demandar de ciertos cambios para adaptarnos a ese nuevo escenario. Estamos viviendo una evolución continua.

En otra de mis reuniones profesionales salió el tema de la navegación por Internet. Qué sitios visitas habitualmente? me preguntaron. Sin duda según maduramos como usuarios el número de sitios que visitamos se reduce, y se consolida un pequeño grupo de sitios que visitamos con una frecuencia muy alta. Al principio uno quiere ver "todo", todas las opciones, lo máximo posible. Cuando empiezas a consolidar tu experiencia y a comprender la magnitud de la información disponible, reduces tus objetivos.

Las innovaciones en navegadores han jugado también un papel importante en los hábitos y forma de navegar. Por tanto considero que la evolución sigue adelante. Los contenidos son multiplataforma, accesibles en todo momento y ahora además en todo lugar.

sábado, 15 de octubre de 2011

Ser parte de un equipo

Hace bastante tiempo, en una entrevista laboral, me encontraba explicando con detalle todas las funciones que desempeñé en mi último trabajo. Formaba parte de un equipo pequeño muy versátil que desarrollaba en conjunto todas las actividades de Marketing Digital coordinados por un director, por lo que en toda mi exposición hablé en plural: hicimos, desarrollamos, vendimos, conseguimos, planeamos, negociamos, nosotros...

En un momento, mi entrevistador, un alto ejecutivo muy veterano, muy agresivo y distante durante toda la entrevista y algo maleducado, me interrumpió: "quiero oirte 'yo', quiero saber lo que hacías tú, tus funciones. No quiero volver a oir 'nosotros', no me interesa el equipo". Accedí a seguir sus instrucciones no sin dificultad, puesto que había proyectos en los que no era sencillo separar atribuciones y sobre todo, porque por la versatilidad del equipo, todos hicimos de todo en alguna fase de los proyectos.

No conseguí el trabajo, pero el entrevistador demostró muy poco liderazgo y no estar interesado en el equipo ni en comprobar si el nuevo miembro se integraría de manera sencilla. La entrevista era para un puesto en un equipo pequeño, y toda mi exposición quería evidenciar mi capacidad de trabajo en equipo, lo cual era muy positivo a priori. El enfoque que le dió el entrevistador desvirtuó mi aportación y me privó de pasar a la siguiente fase, algo que en aquel momento me desilusionó, porque era una buena oportunidad. Revisando objetivamente y tiempo después el proceso y entrevista, me alegro de no haber formado parte de un equipo dirigido por alguien que pretendía diluir la importancia del grupo y que no vió en mi el potencial de formar parte de ese equipo.

Expliqué como en algunos proyectos era yo el encargado de todo, en otros solamente de la estrategia, de planear. En otros me encargaba de ejecutar algunas partes. En otros de ejecutar de principio a fin. En otros simplemente asesoraba en lo que podía. Nuestro director supervisaba y muchas veces delegaba los proyectos y nos dejaba total libertad para desarrollarlos por completo.

En definitiva, es importante lo que hice 'yo' o cualquier otro miembro? Tiene sentido esa pregunta cuando al hablar de 'nosotros' estaba mencionando clara y humildemente mis funciones y la de mis compañeros? El entrevistador no entendió mis funciones ni lo que es un equipo y trabajar en equipo, pues hubiera obviado su prepotencia, sus aclaraciones absurdas y la crispación que intentó traer a nuestra conversación. O si lo entendió, quizás prefirió seguir otra estrategía entrevistando, en la que mi humildad y modestia no tenían cabida.

Hubiera entendido que mi trabajo fue desarrollar campañas online, aplicar técnicas SEO, medir estadísticas web con diferentes herramientas, diseñar la estrategia digital para algunas de las marcas de la compañía, contratar y supervisar agencias, gestionar proyectos y presupuestos, y ser miembro del equipo o en otras palabras: explicar a algún compañero como usar una herramienta o programa, revisar o incluso hacer el trabajo de otros, ayudar en lo que sea, hacer fotocopias si era necesario, proporcionar información, y también dar apoyo, motivar, animar, compartir, sacrificarse, unir, y todo lo que sea preciso para terminar celebrando los éxitos en conjunto.

lunes, 10 de octubre de 2011

Otras ideas sobre medición de actividades de Social Media

La semana pasada tuve una interesante reunión sobre unos proyectos de Marketing Digital en una importante compañía global. Durante unos minutos estuvimos discutiendo sobre la herramienta y la manera más eficaz de medir las acciones de nuestras campañas de Social Media. Estabamos todos de acuerdo en que no hay una única herramienta infalible, y que junto a las posibles métricas cuantitativas de seguidores, retweets, likes, o menciones, habría otras cualitativas mucho más difíciles de calcular. Si bien la calidad de nuestros contenidos podrían evaluarse en términos de respuesta e interacción de nuestro público, no es tan precisa como la medición de campañas online, de medios digitales, de PPC o incluso de televisión.

Además en el caso de la compañía que nos ocupa tenía la dificultad añadida de que se habían lanzado a actuar en Social Media Marketing sin objetivos claros, sin saber muy bien que esperar de esas campañas, en ningún caso ventas puesto que no venden nada tangible, con lo que la medición se dificulta mucho más.

Mi respuesta sin dudarlo un minuto fue: efectivamente, no hay una herramienta infalible, un único índice, pero en este blog hemos dado un repaso a algunas métricas y herramientas que en conjunto pueden ayudarnos a tener una mejor idea de nuestro rendimiento en Social Media.

Como siempre, es clave la planificación, la decisión de por qué hacemos esto, qué buscamos. Después de la ejecución buscando cumplir nuestros planes, vendría esa etapa de medición, de recopilar información, comparar los datos, y hacer las posibles correcciones que puedan servirnos en nuestra cuantificación, y en comprobar si hemos cumplido los objetivos marcados. No es un proceso cerrado, y es revisable en todo momento.

Comparto este curioso artículo de Nick Bennett publicado en SocialMediaToday.com. Nos presenta 4 conceptos que pueden ser tenidos en cuenta en nuestros reportes para cuantificar el retorno de la inversión (ROI) en Social Media. No es que sean infalibles y definitivos, algunos son muy confusos e inexactos, pero son soluciones imaginativas que pueden servir de inspiración en la creación de nuestras métricas más precisas. Repito la importancia de definir y clarificar los objetivos de nuestras actividades, será mucho más fácil detectar si los hemos cumplido o no.